Comer nutritivamente, es comer de manera equilibrada y sana. Si queremos tener una buena salud, es necesario una buena alimentación; podemos ingerir entre otros alimentos, los cereales, las leguminosas (granos que vienen en vainas), frutas, verduras, tubérculos, plátanos, pescado, carne, huevos, lácteos.
Los alimentos son la materia prima de nuestro cuerpo, ellos nos mantienen saludables, es por ello que es importante cuidar nuestra alimentación, saber qué exactamente ingerimos y por qué comemos. Para mantenernos sanos, necesitamos nutrientes, que nos alimentan, y nos brindan salud, estos nutrientes dependen de la calidad de la comida. Si consumimos alimentos cultivados con agro-tóxicos, pesticidas, hormonas, antibióticos, estamos dando a nuestro cuerpo elementos nocivos; de ahí la importancia de los productos agroecológicos y orgánicos.
Somos lo que comemos y al combinar bien una gran variedad de alimentos, tenemos más defensas para protegernos de las enfermedades
El valor nutritivo de la comida
Es bueno saber que comiendo como nuestros antepasados, estamos fortaleciendo el cuerpo, nutriéndolo para protegernos de las enfermedades. Una buena dieta, rica en productos como los granos, la quinua, los nabos, la panela, el amaranto, entre otros sirve para mantenernos fuertes y sanos.
Una dieta moderna cuyo énfasis esté en productos procesados como los fideos, el pan blanco, el azúcar blanco, los embutidos, las colas, los yogures endulzados, entre otros, podría ser más rápida, pero no nos alimenta bien y carecemos de ciertos nutrientes necesarios para el metabolismo.
Como no hay un solo alimento que pueda ofrecer al cuerpo humano todo lo que éste requiere en cantidad y calidad, es necesario que la alimentación sea lo más variada posible. La regla de la buena nutrición es variar la dieta y no comer los mismos alimentos todos los días.
FUENTE: Michelle O. Friend / Nutricionista Ecológica – Revista Innovando en la Cocina Andina