Se dice que el café es bueno para adelgazar porque regula el metabolismo, ya que se encargaría de quemar grasa y aumentar los niveles de energía. Algunos estudios han permitido descubrir que el consumo de cafeína puede mejorar el metabolismo de una persona, por ende puede ayudar a bajar de peso.
Algunos estudios estarían demostrando que unas 6 tazas de café o 600 miligramos de cafeína en el día son requeridas para bajar de peso, y pueden ser útiles dentro de un régimen global con el objetivo de adelgazar. Durante el día, una taza de café puede servir de sustituto para reducir las ganas de ingerir alimentos más ricos en materias grasas y facilitar la digestión.
No obstante conocemos por varios análisis realizados por organismos oficiales de salud que sólo una taza de café puede aumentar la frecuencia cardíaca de 100 latidos por minuto (normalmente es entre 60 y 80) y se puede tardar hasta una hora para volver a la normalidad. También puede causar que las arterias se contraigan, lo que tiende a aumentar la presión arterial, según detalla el sitio Te Interesa.
También se ha descubierto que el café podría aumentar el riesgo de osteoporosis. La cafeína hace que los osteoblastos, las células que participan en la formación de hueso nuevo, no se desarrollen. La cafeína también afecta la absorción de calcio en el intestino y acelera la excreción de calcio, que puede conducir a la pérdida ósea.
Si es verdad lo uno o lo otro y tienes temor a ingerir un rico café; porque de que es delicioso, es delicioso, nadie lo ha negado, sin embargo si los miedos te abruman, puedes preparar también exquisitas bebidas de café de cuatro tipos diferentes.
Cuatro tipos de café saludable
Café de Higos
Se puede preparar un café saludable y muy sabroso con pasas de higos tostados de la siguiente manera: los higos limpios se cortan o pican en pedacitos, se colocan en una asadera y se llevan al horno caliente para tostarlos. Se debe revolver continuamente para que tuesten parejos y no se quemen demasiado. Una vez listos se enfrían y se pasan por un molinillo, luego se guardan en frascos de vidrio que se mantendrán bien cerradas en lugar seco para que el café no se humedezca.
Para preparar el café se calcula una cucharadita de este polvo para cada taza. Se deja hervir unos 10 minutos a fuego lento, se cuela y se mezcla con leche o crema dulce y fresca; o, simplemente en agua, si no soportas la lactosa.
Es muy agradable también para los días de calor tomar este café frío, preparado con leche y endulzado con miel de abeja.
Café de higos desecados crudos
Los higos desecados se cortan en pedacitos, calculando una taza de estos por 3/4 de litro de agua, que se hierve durante 40 minutos. Una vez listo se mezcla con la cantidad de leche que se desee y según el gusto- Es una bebida sana y muy agradable para servir en el desayuno a los más pequeños y por supuesto a todos.
Café de Cereal I
Se prepara café de cereal mezclando una parte de trigo, otra de cebada y otra de afrecho de trigo con 1/2 parte de miel de caña. Una vez bien mezclado se coloca en una asadera y se lleva a horno caliente para tostar, revolviendo siempre para que se tueste uniforme y bien oscuro. Cuando está frío se muele y se guarda en lugar seco.
Para preparar el café se coloca la cantidad necesaria de agua al fuego y cuando hierve se le agrega el café, calculando una cucharada al ras por taza. Se deja hervir unos minutos, se cuela y así está listo para servir solo, con miel de abeja o mezclado con leche o crema dulce.
Café de Legumbres
Se tuesta por separado una parte de habas secas, otra de maíz y otra de cebada. Se muele y se guarda en un frasco tapado. Para preparar el café se usa la misma cantidad y el procedimiento como con el café de cereal.
Y así has logrado preparar cuatro cafés de manera saludable.